PALMA DEL RÍO: CAJASUR Y EL MULTAO SALVADOR

En condiciones normales que un partido político tenga un sancionao en la lista electoral por su actuación dudosilla en Cajasur sería una bicoca para cualquier oponente. Pero el caso es que ni se habla del asunto y bien calladitos que están todos al respecto ya que el asunto Cajasur ha salpicado a PSOE, PP e IU de todas todas. Por orden de mayor a menor político sancionao el guiner is nuestro querido Salvador Blanco Rubio que por ser vicepresidente ejecutivo se lleva una multa de 78.000 eurillos de ala, que suponemos no le será difícil de pagar dado el sueldazo que se llevaba. El segundo sancionao es Juan Pablo Durán del PSOE con 64.000 euritos. Este menos mal que se metió en política porque su empresa de muebles no es que fuese viento en popa a toda vela… El tercero en la lista es el actual Presidente de la Diputación y del PSOE, Francisco Pulido, con 51.000 euros. Luego está el alcalde de Córdoba de IU, con 41.000 eurillos y por último tenemos al José Antonio Nieto del PP con 18.000 euros. O sea, que tos los candidatos por Córdoba y nuestro queridísimo número tres palmeño amés del presi de la dipu están en el saco de los multaos como responsables de la actuación en la caja. Lo que no me cuadra demasiao es que al presidente, un cura llamado Santiago Gómez Sierra, le pongan una multa de 180.000 euros y el vicepresidente “ejecutivo” se escape de la quema con sólo 78.000 euros, digo yo que un vicepresidente “ejecutivo” tiene el nombre de “ejecutivo” por algo, por “ejecutar” decisiones sin ir más lejos…
Pero lo más triste de todo esto es que seguramente ninguno de ellos tendrá que pagar ni un duro ya que puede que lo haga la compañía de seguros de Cajasur, o sea todos los que tenemos cuenta en Cajasur que pa eso los bancos nos cobran comisión hasta pa ir a mear, lo cual si se piensa bien es pa morirse de la risa, que será lo que están haciendo a nuestra costa tan panchos.
Y encima van y dicen que los curas tienen más culpa porque tenían la mayoría en el consejo y hacían lo que querían. Pero ¿por qué ni uno solo de esos políticos que se supone estaban para fiscalizar y que han sido elegidos por los ciudadanos dijo ni pío de lo que ocurría? ¿Por qué no denunciaron a boca llena lo que pasaba? Ni pío de la descapitalización, los riesgos con el ladrillo o el agujero negro que tenía la caja en sus fondos. Ni pío. Un rostro que se lo pisan porque su único argumento es “no, si yo voté a favor de la fusión con Unicaja, yo no he sidoooooooo”. Vamos, pa mear y no echar gota señores. Así que hala, hijos, ahora les volvemos a votar y aquí paz y después gloria.

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