lunes, 20 de diciembre de 2010

PALMA DEL RÍO: PRESUPUESTOS.



Va el Batman y le dice al Robin: te via da el Batmóvil. Y el Robin se pone a llorá de la emoción y se le caen dos lagrimones como puños, pensando que por fin va a tener el Batmóvil bajo su culo. Y va el Batman y dice: toma nota, es el 648.234.765, ahí lo llevas.

Pos los presupuestos de Palma son igual igual. Te pones a llorá de la emoción cuando lees en el Crónica to lo guay que son y las cosas que se van a hacer, se te caen lagrimones como puños y aluego te quedas con dos palmos de narices.

PALMA DEL RÍO Y LOS SLOGANS DE QUE TE CAGAS


Nuevo slogan para Palma de nuestro alcalde: “Palma, Puerta del Sol”. Coño y yo que creía que la Puerta del Sol estaba en Madrid... Pos no, se trata del nuevo slogan que se han inventado nuestros gobernantes para la ciudad. También tenemos estos otros de “Palma, cauce de sorpresas”, “Palma, cuna de grandes toreros”, “Pascual le da la bienvenida”...


Tenemos unos gobernantes que son auténticos poetas. Slogans como este me recuerdan otras frases floreadas y/o maravillosas como "Un niño feliz es un futuro feliz", “Agua en nuestras casas y paz en nuestras calles” (esta, que es del PRI, el PSOE mejicano, viene muy a cuento por lo de las inundaciones recientes, por cierto), “Empleo para todos”, “Financiamos tus sueños”, “No podemos conducir por ti”, “No veo tele, sólo miro el canal de documentales y AnimalPlanet”, "Cuando conozco a una chica, no me importa su físico, sino lo de adentro", “No cabe duda!” (Y Duda se fue llorando), “Chuta a gol!!!” (y Gol murio de sobredosis), “Un parto en la calle... es alumbrado público”, “Cuando un jugador se va por la banda... El portero se va por los mariachis”, “No hay nada para una inyección letal como una aguja esterilizada”, “No me via sacá una foto con Flash porque Supermán se va a poner celoso”, etc. Etc. Etc. Etc.


Por no ser menos proponemos los siguientes slogans: "Palma, naranja requete-exprimida", "Palma, amanece que no es poco" o "Palma soy yo" (este último queda muy Luis XIV pero nuestros gobernantes es que son ansí).