martes, 30 de junio de 2009

Los elefantes blancos de Cultura


Antes de entrar en materia, una aclaración:

"Los elefantes blancos, también conocidos como elefantes albinos, eran considerados sagrados en la antigüedad, especialmente en ciertos países asiáticos. Mantener estos animales resultaba muy caro, porque era necesario darles comida especial, y también dar acceso a la gente que quería adorarlos. En Tailandia, si un rey no estaba conforme con alguien, le regalaba un elefante blanco, lo cual seguramente haría que esa persona perdiese todo su dinero. Actualmente, esta expresión se usa para referirse a algo que cuesta mucho dinero mantener y no tiene ningún uso".

Pues bien, toda esta introducción viene a cuento de que la semana próxima aparecerá uno de los elefantes blancos del Patronato de Cultura: la Feria del Teatro, por mucho que los gerifaltes digan que este evento se patrocina gracias a la aportación de la Junta de Andalucía, Diputación, cajas provinciales, etc... La verdad es que la programación cultural durante el resto del año brilla por su ausencia (aparte de su nulo interés, pero eso ya es otra cuestión) y parece que todo el presupuesto del año se destina a este "escaparate" del teatro. Bueno, todo no, aún queda otro elefante blanco: el Teatro Coliseo, que es tan grande que si no acuden al evento 400 personas parece que han ido cuatro gatos, aparte de los costes de mantenimiento que genera y luego que no está abierto a las asociaciones (bueno, a las pocas que quedan en activo y que tienen ganas de hacer algo) porque deben de pagar una fianza para usar las instalaciones. Y a todo esto, la programación cultural continúa siendo un páramo, a excepción de los festejos, que sí, que es folklore y todo lo que queramos, pero que da la impresión de que Junta, Diputación y Ayuntamientos están resucitando esa España franquista de tonadilleras y toreros que tanto criticaba el PSOE en los años 80. Sólo hace falta echar una ojeada por la parrilla de programación de "la nuestra" (Canal Sur, of course).
Pero centrándonos en el caso que nos ocupa, la situación de la cultura en Palma se resume perfectamente en la canción del flamenco Pepe Pinto: "que en la diestra y la siniestra / tienes un par de agujeros /por donde se va a los baños /el río de mis dineros...". Vaya, la única pega es que el dinero que se pierde en mantener estos dos elefantes (ojo, al menos uno de ellos sitúa a Palma en el mapa durante una semana) no es suyo, sino de todos.
En fin, queridos lectores, por lo menos intenten disfrutar de esa semana del teatro el máximo posible (aunque las vanguardistas propuestas del teatro andaluz actual les traiga al pairo) porque lo estamos pagando tós.